En la industria metalúrgica, algunos trabajos se vuelven más complejos debido al espesor de los metales que hay que manipular o de los metales que hay que cortar.
Por suerte, hoy existen distintas técnicas que permiten trabajar en estos casos con gran precisión y eficacia. Entre ellas, el oxicorte y el corte por plasma son dos de las más utilizadas en proyectos de corte térmico pesado.
Aunque ambas técnicas comparten la capacidad de cortar metales ferrosos de gran espesor, sus principios de funcionamiento, aplicaciones y resultados son distintos. Conocer las diferencias es fundamental para optar por uno de los dos métodos según las necesidades específicas.
Diferencias fundamentales entre oxicorte y corte por plasma
* El oxicorte es un proceso que utiliza una llama generada por la mezcla de oxígeno y gas combustible (generalmente acetileno o propano) para calentar el metal hasta su temperatura de ignición, y después, con un chorro de oxígeno puro, oxidar y expulsar el material fundido.
Es especialmente eficaz para cortar acero al carbono de gran espesor, y se caracteriza por su bajo coste operativo y su capacidad para cortes muy profundos. Ya sabes que en Álvarez San Miguel estamos especializados en realizar trabajos de corte por oxicorte al precio más competitivo de Madrid.
* El corte por plasma, por su parte, se basa en un chorro de gas ionizado a muy alta temperatura y velocidad que funde el metal y lo elimina mediante presión. Puede cortar una mayor variedad de metales (acero inoxidable, aluminio, cobre…), ofreciendo buena velocidad y precisión de corte, especialmente en grosores bajos o medios.
¿Cuándo conviene uno u otro? Factores clave a considerar
- Espesor del material: El oxicorte es la mejor opción cuando se trata de chapas o bloques de acero al carbono de más de 50 mm. Para espesores inferiores, el corte por plasma es más rápido y eficiente.
- Tipo de metal: El oxicorte solo es viable en metales ferrosos (principalmente acero al carbono). Si el material es inoxidable o no ferroso, el plasma es la única opción.
- Precisión del corte: Si se requiere una alta precisión dimensional y menor rebaba, el plasma ofrece mejores resultados, especialmente con tecnología CNC.
- Velocidad de corte: En grosores bajos y medios, el plasma es mucho más rápido. Sin embargo, el oxicorte mantiene un rendimiento aceptable en cortes gruesos, donde el plasma pierde eficiencia.
- Coste operativo y mantenimiento: El oxicorte suele ser más económico en consumibles y equipos, lo que lo hace ideal para proyectos industriales de gran volumen con cortes repetitivos y tolerancia estándar.
- Accesibilidad y movilidad: Para trabajos en campo o condiciones difíciles, el oxicorte es más adaptable gracias a su sencillez técnica y robustez frente al entorno.
Aunque tiremos piedras contra nuestro propio tejado como expertos en oxicorte que somos en Álvarez San Miguel, lo cierto es que no podemos decirte que una técnica sea mejor que la otra, sino que se deben conocer las dos para saber cuál es la más adecuada para las necesidades de cada proyecto. El asesoramiento especializado es la mejor forma de garantizar cuándo usar oxicorte o corte por plasma.
En todo caso, cuando se trate de cortes de gran espesor en acero al carbono, el oxicorte es una solución fiable, económica y eficaz frente al corte por plasma, ¡consúltanos!