Las baterías son una importante fuente de metales valiosos, además de muy útiles en nuestra vida diaria. Sin embargo, una disposición y tratamiento incorrectos pueden tener graves consecuencias para la salud y el medioambiente. El reciclaje de baterías es un proceso fundamental para evitar poner en riesgo a las personas y a los ecosistemas.
¿En qué consiste el reciclaje de baterías?
Una vez recolectadas, las baterías se transportan a las instalaciones de reciclaje especializadas que se encargarán de desmontarlas y separarlas. En dicho proceso se extraen los materiales valiosos como el litio, el plomo o el cobalto, que se utilizarán de nuevo en la fabricación de otros productos.
El reciclaje de baterías es una opción respetuosa y sostenible que garantiza que, materiales peligrosos, no acaben en vertederos, puedan contaminar las aguas o el aire y no supongan un grave riesgo para plantas, animales y personas.
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