El aluminio nunca había sido un material especialmente costoso en el mercado, pero la crisis diplomática y la posterior Guerra de Ucrania ha hecho que sus precios se disparen como ha ocurrido con otros muchos metales.
Hoy, reciclar este material puede proporcionarte un buen extra para tu economía y en nuestro servicio de reciclaje de cables nos encontramos con un gran aumento de cables de aluminio, además de los tradicionales de cobre.
A propósito del aluminio, hoy nos gustaría aprovechar este post para hablarte de un concepto que quizás hayas escuchado en alguna ocasión: ¿sabes lo que es el anodizado de aluminio? Si no tienes muy claro en qué consiste, te animamos a leer este post.
¿Qué es el anodizado de aluminio?
Pues vayamos directos al grano. El anodizado de aluminio es un proceso que se aplica a este metal (aunque también a otros) con el objetivo de aumentar su resistencia y mejorar su durabilidad. En definitiva, para mejorar su calidad final.
Para llevar a cabo el anodizado de aluminio, el metal se somete a un proceso electroquímico que consiste en crear una capa de óxido de aluminio (alúmina) sobre la superficie de las piezas del aluminio original. Así, se consigue aumentar el espesor y con ello su durabilidad, resistencia y, en general, vida útil.
¿Por qué se realiza?
El objetivo de someter al aluminio a este proceso es evidente: aumentar su resistencia y durabilidad. Pero al margen de estos objetivos, el anodizado de aluminio permite:
- – Que el metal es más consistente y duro contra el desgaste y la erosión.
- – Que tenga diferentes acabados cromáticos para poder darle más usos estéticos.
- – Que el metal ofrezca un mejor aislamiento eléctrico allí dónde se aplique.
- – Que el aluminio resulte tan versátil como duradero en el tiempo.
El tema de los acabados cromáticos es realmente importante ya que, una gran parte de los procesos de anodizado de aluminio se realizan con fines estéticos. Al fin y al cabo, hoy el aluminio está presente en muchísimos objetos y estructuras de nuestra vida cotidiana y haber adoptado diferentes tonos ha sido fundamental en este sentido.
El anodizado de aluminio permite que este metal tenga diferentes tonalidades como negro, azul, dorado, bronce, burdeos, plateado… También puede llevarse a cabo este proceso sin colorear al aluminio de tal forma que lo que se genera es una capa traslúcida que reforzará la superficie de este metal y lo hará ser más resistente y duradero, pero sin aportar color.
El reciclaje del aluminio
El aluminio, como el acero, es uno de los metales que permite un fácil reciclado. De hecho, el reciclaje de aluminio permite reducir hasta 4 kg de CO2 por cada kilo de metal reciclado, incluso más en aquellos casos en los que se recicla aluminio tratado mediante el proceso que hemos visto hoy en este post.
En los últimos años, hemos asistido a un auge en la instalación y reciclaje de cables conductores de aluminio, además de los habituales de cobre. Los cables de aluminio anodizado cada día son más frecuentes ya que este proceso aumenta también la durabilidad y resistencia de los cables, de ahí que se usen y se reciclen en mayor proporción.
Si quieres más información sobre este tema, en el equipo de Álvarez San Miguel podemos ayudarte. Y también puedes acudir a nosotros si quieres reciclar aluminio, ya sea en piezas completas o en cables, ya que es otro de los servicios de nuestra empresa.