Los motivos que pueden llevar a una empresa a contratar nuestro servicio de desmantelamiento de naves industriales en Madrid son muy variados.
Por ejemplo, nos hemos encontrado con muchos casos en los que la actividad empresarial finaliza (ya sea por cese o por traslado) y la nave industrial se queda en desuso. Para poder venderla o arrendarla se hace necesario este desmantelamiento y limpieza previa que deje la instalación lista para sus próximos inquilinos.
En otros casos, se trata de realizar una reforma integral de la nave, ya sea para reanudar o para cambiar la actividad profesional. Pero para poder abordar esa obra, es necesario un vaciado completo que implica la acción de empresas especializadas como la nuestra.
Pues bien, sea cual sea el motivo, ¿qué tipo de residuos industriales solemos encontrarnos cuando llevamos a cabo estos procesos de desmantelamiento? Pues hoy te contamos un poco más sobre este servicio que también prestamos en Álvarez San Miguel.
Consideraciones previas sobre el desmantelamiento industrial.
A lo largo de nuestra extensa trayectoria en este sector hemos sido testigos de cómo nuestros trabajos de desmantelamiento de naves industriales han cambiado notablemente. No hemos tenido más remedio que adaptarnos a los nuevos tiempos en los que, la modernización de fábricas y plantas industriales, ha dado lugar a nuevos tipos de residuos y, en consecuencia, nuevas formas de recogerlos y tratarlos.
Por ejemplo, hoy es habitual recurrir al uso de radiales y maquinaria de corte específica para poder retirar maquinaria que se queda obsoleta y así poder dejar libres las instalaciones industriales para una utilización futura. De la misma forma, la cantidad de chatarra electrónica es mucho mayor que hace tiempo.
¿Qué residuos industriales son los más frecuentes en los procesos de desmantelamiento?
En primer lugar, comenzaremos definiendo qué son los residuos industriales, siempre refiriéndonos a los no peligrosos: pues son aquellos residuos que provienen de procesos de fabricación o transformación generados por las industrias, así como del desguace de las instalaciones, estructuras o maquinarias de las propias plantas de producción o fábricas.
Son residuos de desechos de valor variable y, en la mayoría de los casos, no es posible su aprovechamiento. Algunos ejemplos habituales de residuos industriales no peligrosos serían:
- Maquinarias de fabricación (diferente en función de la actividad).
- Enfriadoras y aparatos industriales de aire acondicionado.
- Calderas.
- Hornos.
- Depósitos para distintos tipos de combustibles.
- Estructuras como semiplantas metálicas, escaleras y barandillas.
- Cabinas de pintura.
- Puentes de lavado.
- Naves metálicas.
- Vigas de hierro.
- Toros o carretillas elevadoras.
- Equipos informáticos obsoletos.
- Escombros…
¿Necesitas contratar un servicio de desmantelamiento de naves industriales? Pues recuerda que en Álvarez San Miguel contamos con personal y maquinaria especializada en este tipo de trabajos, además de contenedores de almacenaje para restos industriales generados por el vaciado, derribo o demolición de naves.