Aunque suene a tópico, los pequeños gestos individuales que cada persona realiza en materia de sostenibilidad pueden ser realmente significativos para el futuro del planeta.
Y si hablamos de “pequeños grandes gestos”, la llamada regla de las “7R” surge como una guía estratégica y educativa que todos podemos usar como referente, ya que promueve un consumo más consciente y una gestión de recursos más eficiente.
Estas siete acciones, identificadas cada una por una palabra que comienza con la letra R, proponen un cambio de mentalidad orientado a minimizar el impacto ambiental y a avanzar hacia un modelo de economía circular. ¿Sabes cuáles son esas 7R claves en la actualidad?
¿Cómo mejorar la sostenibilidad? Cumpliendo estas 7R claves
1.- Rediseñar
El primer paso para mejorar la sostenibilidad del entorno es anticiparnos, no seguir haciendo las cosas como hasta ahora y repensar cómo deben ser los productos y los servicios así como los procesos de fabricación de los mismos. Rediseñar implica que debemos crear bienes con criterios ecológicos, usando materiales sostenibles, facilitando su reparación, reciclaje y reutilización. Esta etapa es crucial para reducir el desperdicio desde el origen.
2.- Reducir
Reducir significa consumir menos y de forma más eficiente desde todos los puntos de vista, sobre todo, a la hora de consumir bienes y objetos. Pero también se trata de evitar el derroche energético y de disminuir el uso de materias primas, envases y productos superfluos. Reducir es clave para frenar el agotamiento de recursos naturales y disminuir la huella ecológica.
3.- Reutilizar
Antes de desechar, es fundamental valorar si un objeto puede tener una segunda vida. Reutilizar alarga la utilidad de los productos, evitando que se conviertan prematuramente en residuos y reduciendo así la demanda de nuevos recursos. Y aquí, el papel de empresas como Álvarez San Miguel es clave ya que, precisamente, nos dedicamos al tratamiento de muchos residuos que pueden reutilizarse y tener una segunda vida útil.
4.- Reparar
En lugar de reemplazar, reparar apuesta por devolver la funcionalidad a los objetos dañados o envejecidos. Esta práctica, cuarta dentro de estas 7R claves para mejorar la sostenibilidad del entorno y que muchos realizan por motivos más económicos que medioambientales, promueve la economía local, evita el consumo innecesario y contribuye a una cultura del mantenimiento frente a la obsolescencia programada.
5.- Renovar
Renovar consiste en modernizar un producto sin reemplazarlo completamente, integrando mejoras funcionales o estéticas que prolonguen su vida útil para evitar recurrir a más recursos o procesos de fabricación. Este concepto se aplica, por ejemplo, a electrodomésticos, mobiliario o vehículos que se renuevan para que sigan vigentes.
6.- Recuperar
Cuando los productos ya no son reutilizables ni reparables, recuperar materiales útiles a partir de los residuos permite reintegrarlos en nuevos ciclos de producción. La recuperación reduce la extracción de materias primas vírgenes.
7.- Reciclar
Reciclar es el último eslabón de la cadena y consiste en transformar los residuos en nuevos productos. Por ejemplo, nuestra empresa se dedica, entre otras cosas, al reciclaje de baterías en Madrid con el objetivo de aprovechar sus materiales y componentes para darles una segunda vida. Aunque es fundamental, debe ser la última opción tras agotar las anteriores, pues requiere consumo energético y procesos industriales.
Estas 7R claves forman una jerarquía lógica y coherente que permite optimizar el uso de los recursos, reducir el volumen de residuos y fomentar un modelo más respetuoso y sostenible con el medioambiente. Aplicarlas en nuestro día a día, tanto a nivel individual como empresarial, es esencial para avanzar hacia un futuro verdaderamente sostenible.